Champions League 2014-2015: Barça y Juve se adelantan en sus eliminatorias

El Barcelona ha ganado al Manchester City en el Etihad Stadium por 1-2, un marcador que debería suponerle el pase a cuartos de final sin muchos problemas ya que el conjunto inglés tendría que hacer, mínimo, dos goles en el Camp Nou. Aún así, la sensación es de que el Barça ha dejado escapar la oportunidad de cerrar completamente la eliminatoria con un marcador mayor.

La primera mitad del Barcelona fue muy buena, gracias a Messi que dominó el juego en cada rincón del terreno, gracias al City, cuyo planteamiento de salida fue indescifrable hasta para ojos expertos. Argentino aparte, el protagonista iba a ser el silbado Luis Suárez, que anotaría los dos goles que ponían al Barça en una situación bastante franca.

En la segunda mitad, el City mejoró y fruto de ello llegó el gol de Agüero, de una magnífica asistencia de Silva. La auto expulsión de Clichy, que hizo sobrados méritos para irse a la calle, puso de nuevo el escenario a favor de los azulgranas que se reservaron, quizá por miedo a una contra letal como la del 1-2. Al final, otro regalo, éste de Zabaleta, puso a Messi en bandeja el 1-2, pero Leo falló el penalty y el rechace a puerta vacía.

Los dos finalistas de de la Liga de Campeones de 1996-1997, la Juventus de Turín y el Borussia Dortmund, se volvían a ver las caras en competición europea, esta vez en una eliminatoria de octavos de final. De momento, la Juve se empieza a tomar revancha de aquella final perdida ganando en la ida por 2-1, revancha que será completa si certifican su pase a cuartos en la vuelta, a jugar el 18 de marzo.

A los 12 minutos se vio el primer gol en el Juventus Stadium, obra de Tévez a puerta vacía aprovechando un mal rechace del portero Weidenfeller. Apenas seis minutos más tarde, Reus aprovechaba otro regalo, un resbalón de Chiellini, para fusilar a placer a Buffon. Pero antes del descanso se movería de nuevo el marcador, de nuevo a favor de la Juve con un gol de Álvaro Morata tras pase de la muerte de Pogba.

El 2-1 ya sería el marcador definitivo. Los locales, conscientes de que no es precisamente el mejor resultado para defender en Dortmund, buscaron con insistencia un tercer gol durante la segunda mitad. Ocasiones hubo, pero no goles, así que los de Klopp pudieron respirar tranquilo. El 2-1, al fin y al cabo, no es el peor de los resultados para un equipo que parece salir del bache que ha atravesado durante toda la temporada.

Vía | UEFA

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