España regresa con una derrota ante Francia en partido amistoso

La selección española de fútbol volvía a jugar tras aquel partido contra Australia, el que supuso la despedida del Mundial 2014, y lo hacía con hasta cinco caras nuevas en la convocatoria. De esos cinco, cuatro han tenido la oportunidad de estrenarse como internacional, y esa es la mejor noticia tras un partido que no ha dejado buenas sensaciones precisamente.

España ha perdido por la mínima ante Francia, en Saint Denis, realizando un mal partido general. Lejos de intentar grandes conclusiones, pues al fin y al cabo se trataba de un partido amistoso, lo cierto que la selección se ha parecido a la que tan sólo hace año y medio atrás ganaba en este mismo escenario y prácticamente sellaba su billete para Brasil.

En el once inicial, Del Bosque daba ya la alternativa a tres de los nuevos: Raúl García, que no entró mucho en juego, Mikel San José, que tuvo una noche entretenida marcando a Benzema, y Carvajal, que tuvo una destacada actuación con muy buenas incorporaciones al ataque. Precisamente las apariciones de Carvajal o los pases de Cesc era lo más destacado en un equipo que, nuevamente, era bastante plano y previsible.

Sin crear ocasiones, sin tirar, el dominio se fue perdiendo durante la segunda mitad, conforme Francia iba creciendo. Benzema avisó, pero el colegiado anuló el gol del galo por fuera de juego, pero el de Remy sí subió al marcador. El nuevo cachorro de Mourinho en el Chelsea finalizó una preciosa jugada con un disparo ante el que nada pudo hacer De Gea, que jugó todos los minutos.

La entrada del otro debutante, Alcácer, no supuso un cambio significativo en el juego de España, pero sí las de Silva e Isco. Los dos talentosos combinaron en más de una ocasión, como en la mejor ocasión para España, un disparo de Silva que se fue por poco. Sin embargo, su aportación fue insuficiente como para cambiar el marcador y evitar la derrota.

Ahora toca hacer borrón y cuenta nueva y pensar en el próximo encuentro, el próximo lunes 9 de septiembre ante Macedonia. Será un rival que venga a encerrarse, por lo que España tendrá que recuperar su ritmo, su verticalidad sin perder el toque, para comenzar con buen pie la fase de clasificación para la Euro 2016, que es lo importante.

Foto | FIFA

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