Inglaterra elige a Sam Allardyce como nuevo seleccionador

A Sam Allardyce lo llaman Big Sam por su tamaño. De jugador, aprovechaba su envergadura para ir siempre a por todas y sin miedo al choque, y en su dilatada carrera como entrenador les ha exigido a sus jugadores lo mismo que él hacía sobre el verde. Por eso, sus equipos se han caracterizado por la entrega y el esfuerzo, contagiando de pasión al típico aficionado inglés.

Ahora Allardyce tendrá la oportunidad de dirigir la selección inglesa, el mayor premio para un técnico de su país. Un premio que le llega después de casi tres décadas como técnico y más de 400 partidos en la Premier League, en equipos como el Bolton Wanderers, el Newcastle United, el Blackburn Rovers, el West Ham United y el Sunderland, al que deja para unirse a la selección.

Una selección llena de talento pero que no funciona. El ex seleccionador, Roy Hodgson, intentó que esos jugadores practicaran el juego posicional, pero la apuesta no salió del todo bien, especialmente en los momentos en los que tenía que funcionar. Si Inglaterra llegaba a enamorar durante las fases de clasificación, en las fases finales era una absoluta decepción.

Con Allardyce, en teoría, se parte con una premisa de juego completamente diferente. Amante de la lucha y del juego directo, sus equipos no se caracterizan por tener el balón e incluso hay quien lo llama «primitivo», lo cual resulta curioso en alguien que siempre ha estado abierto a las innovaciones y considerado un pionero en asimilar e implementar métodos científicos.

Veremos por qué método apuesta Allardyce para cumplir con el objetivo que tiene por delante: meter a Inglaterra en el Mundial de Rusia 2018. Como poco, ya cuenta al menos con la aceptación de los hoolligans de la selección inglesa, a los que les gusta que alguien como Big Sam, que representa una especie de vuelta a los orígenes, se haga con el puesto de seleccionador inglés.

Vía | The FA

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