Liga de Campeones 2012-2013: el Real Madrid se queda a un gol de la remontada ante el Borussia Dortmund

No pudo ser. El sueño del Real Madrid de remontar ante el Borussia Dortmund y alcanzar una nueva final de la Liga de Campeones no ha podido cumplirse a pesar de que ha estado bastante cerca. Los blancos necesitaban tres tantos para poder pasar a la final pero solo pudieron ganar por 2-0, un resultado insuficiente para alcanzar el objetivo de seguir peleando por la Décima.

La gesta era difícil pero el Real Madrid salió muy bien al partido e hizo numerosas ocasiones de gol que no se materializaron. Con el paso de los minutos la posibilidad de la remontada estaba cada vez más lejos pero cuando ya parecía imposible llegaron los goles de Benzema y Sergio Ramos que dejaban al Real Madrid a un tanto de la final pero con solo 6 minutos por jugar que se fueron esfumando poco a poco permitiendo al Dortmund aguantar el resultado y meterse en la final aunque con bastante sufrimiento, algo que a buen seguro ya esperaban.

El Real Madrid necesitaba fútbol y goles para lograr la gesta y para buscarlos Mourinho decidió dejar en el banquillo a Khedira y meter en su lugar a Modric para que hubiera sobre el campo dos medioscentros con capacidad de crear fútbol ya que el Dortmund de nuevo se iba a centrar en tapar en la medida de lo posible a Xabi Alonso que ni siquiera acabó el partido y que estuvo bastante desdibujado.

Una gran remontada suele pasar por una salida en tromba y así ocurrió este martes porque los blancos salieron muy fuertes del vestuario, a muchas revoluciones apoyados por el público y presionando muy arriba para crear problemas al Borussia. La táctica salió bien y a los tres minutos Higuaín ya tenía un mano a mano que no podía convertir en gol. Además, el Madrid robaba muy arriba y acosaba al Dortmund que concedía un corner tras otro como fruto de su nerviosismo. En esos minutos la remontada parecía más qee posible porque las ocasiones se sucedían. Primero la tuvo Cristiano Ronaldo con un control orientado con el pecho y posterior volea que sacó el portero. Más fácil todavía parecía la que tuvo Ozil, de nuevo mano a mano y que intentó sorprender al portero al primer palo sin éxito.

Solo se llevaban 20 minutos de juego y el Real Madrid estaba cumpliendo el guión de crear ocasiones…pero los goles no llegaban. El ritmo alto de juego no podía durar mucho más tiempo y a partir del minuto 20 el Madrid bajó un poco sus prestaciones ante un Dortmund que se tranquilizó algo más y empezó a tocar el balón y llegar arriba. Durante la fase final de la primera mitad los alemanes tuvieron el partido bastante controlado y ya las ocasiones para los blancos no llegaban de forma tan clara como al principio del partido. En muchas ocasiones el Real Madrid se empeñaba en entrar por el centro y los alemanes dejaban libre a Essien que no ponía buenos balones.

Una jugada de Higuaín en banda izquierda a la que no llegó Cristiano fue la mejor ocasión blanca en esa fase del partido. Por parte Lewandowski se peleaba en el cuerpo a cuerpo con Sergio Ramos que le propinó un par de manotazos que no vio, o no quiso ver, el árbitro y que le podían haber costado una amarilla que vio en la segunda mitad en la que también propinó un tercer manotazo al delantero polaco. Finalmente los jugadores se fueron al vestuario y el marcador no se había movido así que la gesta era todavía más complicada que al principio porque quedaba la mitad de tiempo.

En Real Madrid necesitaba salir de nuevo en tromba en la segunda mitad pero ya no fue así. Poco a poco el partido se fue rompiendo y Lewandowski pudo matarlo con un disparo al larguero. También lo pudo hacer Gündoğan que se quedó solo ante Diego López que hizo una espectacular parada a su disparo. Los minutos pasaban y al Real Madrid le costaba mucho crear ocasiones a pesar de que Mourinho se la había jugado quitando a Coentrao y poniendo a Benzema y Kaká en el campo.

El ambiente se había enfriado y la posibilidad de remontada casi se había marchado…hasta que el partido enloqueció en el minuto 83. En ese momento Benzema aprovechó una buena internada por la derecha de Ozil para enviar el balón a la red y el Bernabeu volvió a creer. Los blancos se fueron de nuevo a la carga con más empuje que fútbol y en el 89 un balón atrás de Benzema fue enviado por Ramos a la red. Quedaba un minuto del tiempo reglamentario pero todavía era posible.

Ese minuto voló con una lesión y Webb concedió 5 minutos de añadido. En ellos el Real Madrid intentó colgar balones y provocó un par de corners pero los goles habían llegado demasiado tarde y no hubo tiempo para más, así que esfuerzo sin premio final para el Real Madrid que vuelve a quedar a las puertas de la final en buena parte por el mal partido jugado en Alemania.

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