Mundial de balonmano 2013: España a cuartos tras ganar claramente a Serbia
La selección española jugó su primer match ball ante Serbia, subcampeona de Europa y rival del equipo de Valero Rivera en estos octavos de final del Mundial de balonmano 2013. Y lo ha resuelto con bastante claridad y sin sufrimiento, aunque no sin problemas. El marcador final de 30-21 demuestra claramente la superioridad de España en este partido, cuando no es precisamente fácil ganar partidos de este tipo con tanta diferencia.
Las circunstancias no fueron precisamente del todo favorables para España, porque si bien el ambiente ayudó mucho, lo que es el arbitraje no barrió para casa precisamente. Decisiones dudosas, como la más que rigurosa expulsión de Viran Morros, pudieron complicarle mucho la vida a España, pero en lugar de eso, los de Valero Rivera se espolearon y superaron estos problemas con brillantez, mostrando mucha concentración.
Tras un comienzo igualado, España consiguió un parcial de 4-0 que puso a los Hispanos con un tanteo favorable de 7-3. Entonces llegó la expulsión de Viran Morros, un hombre vital para el centro de la defensa española. Sin embargo, los de Valero Rivera no sólo no acusaron el golpe, sino que los motivó. La defensa española se hizo más intensa, redobló esfuerzos, y a partir de ahí se ganó el partido.
Robar y matar a la contra. Esa fue la filosofía de España y con ella, y con los goles de Julen Aguinagalde en el pivote y de Dani Sarmiento desde el exterior, los Hispanos se escaparon en el marcador. Un gol en el último instante de Nikcevic dejó el tanteo al descanso en 20-12, una ventaja de 8 goles que había que administrar con cabeza y con inteligencia, evitando entrar en las provocaciones de los jugadores serbios.
La segunda mitad fue diferente, porque España no pudo mantener la misma intensidad en defensa, y al salir no tanto a la contra y con el juego en estático poco productivo, a España le costó hacer goles. Fue entonces el momento de que apareciera Sterbik, y el portero español, precisamente de origen serbio, ayudó a que los serbios no se acercaran nunca en el marcador a España.
Así, al ecuador de esta segunda mitad, el parcial era sólo de 5-3 para Serbia, muy pocos goles. El seleccionador serbio, todo un mito del balonmano como Veselin Vukovic, pidió un tiempo muerto para lanzar una última arenga a los suyos, pero los que despertaron fueron los españoles. Las rotaciones pusieron piernas frescas en la pista, y España remató el partido para terminar ganando por 11 goles de diferencia.
El extremo gerundense Albert Rocas fue elegido el mejor jugador de este partido, siendo además el máximo goleador con 7 dianas. Después, en los goleadores, encontramos a Dani Sarmiento con 5 goles, y el resto estuvo bastante repartido, destacando Aguinagalde con 4. Ahora, en cuartos de final, en el partido más decisivo, espera Alemania. El partido se volverá a las 19:00 horas, el miércoles, nuevamente en Zaragoza.