El nuevo Código Antidopaje para 2015 viene con castigos más duros para los infractores

Durante el año 2014, el dopaje ha seguido siendo la principal lacra del deporte a nivel mundial. Los casos de deportistas que dan positivo se han seguido repitiendo y de forma bastante generalizada, sin distinción de sexos o de edad, sin distinción de nivel y sin distinción entre profesionales o amateurs.

Para el año 2015 la lucha por conseguir el utópico suelo de un deporte limpio proseguirá y, además, lo hará con nuevos bríos. Y es que la Agencia Mundial Antidopaje ha realizado cambios sustanciales en alguna de sus normas, cambios que ya han entrado en vigor desde que entró el nuevo año y de los que se espera sirvan para conseguir mejores resultados en la materia.

La principal novedad es que se duplica el castigo a aquellos deportistas que den positivo. Así pues, lo que antes eran dos años de castigo ahora serán cuatro años, tanto para las sustancias específicas chino para las no específicas, siempre y cuando el deportista no pueda demostrar falta de intencionalidad o que todo fue causa de una negligencia.

Del mismo modo, la AMA será a partir de ahora más flexible en los casos en los que un deportista sí pueda demostrar que su positivo no se debe a un acto involuntario.  Así pues, en casos en los que quedara probado que no hubo intencionalidad, el castigo será menor. Lo mismo para quienes reconozcan su culpa y para quienes colaboren con la investigación.

La AMA contemplará desde 2015 dos nuevos delitos, el de complicidad u el de asociación prohibida. De este modo, cualquier deportista que facilite, colabore o incluso encubra a otro que cine infracciones puede ser castigado, lo mismo que si se relaciona con personas que hayan sido condenadas por algún delito relacionado con el dopaje, como por ejemplo médicos o entrenadores que han sido castigados a no ejercer su profesión.

Por último, cabe señalar que los deportistas que vayan a volver a competir, ya sea porque vuelven de una retirada o porque estaban sancionados, tendrán que avisar de su regreso con 6 meses de antelación para que se les puedan realizar controles. Además, las muestras de todos los deportistas podrán guardarse durante un plazo máximo de 10 años, por lo que podrían producirse positivos muy a posteriori si nuevos controles, con avances técnicos, revelan que hubo dopaje.

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