Una muesca más en su revolver. Es su gol número 25 en el Liverpool y cada vez va a más. En el minuto 63 recibió un buen pase de Fabio Aurelio, paró el balón, se giró y chutó. Fácil y sencillo. Como fácil y sencillo le resulto a los hombres de Benítez contener al Inter de Milán. Lo pararon ya en campo interista con una buena presión y una disposición táctica que anuló por completo a los italianos, que nunca consiguieron hacer creer en una posible remontada. Fruto de esa buena presión llegó el robo de balón que propició el gol de Torres.
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