El atletismo se tambalea tras los positivos de Tyson Gay y Asafa Powell
El atletismo vivió ayer uno de sus días negros, con el dopaje como telón de fondo. Ayer se conoció que varios atletas habían dado positivo en diferentes controles anti doping, a pocas fechas de que se celebre el Mundial este verano en Moscú. Y entre esos atletas encontramos a Tyson Gay y Asafa Powell, dos ex plusmarquitas mundiales, dos de los hombres más rápidos de la historia.
El norteamericano Tyson Gay estaba firmando un año brillante, y con la mejor marca del año iba llegar como gran favorito al oro mundial. Sin embargo, ha tenido que reconocer ahora que ha dado positivo en un test, aunque no ha dicho por cual sustancia, culpando al médico. A sus 31 años, Gay espera el contraanálisis que lo libraría de enfrentarse a una sanción de dos años.
Apenas un par de horas de que Gay confesara su positivo, saltaba la noticia de que el segundo hombre más rápido de este 2013, Asafa Powell, también pitaba en un control antidopaje. Powell daba positivo por una sustancia llamada oxilofrina tras un test realizado durante los trials de Jamaica. Y lo peor es que no ha sido el único atleta de este país en dar positivo durante los campeonatos nacionales jamaicanos.
Junto a Powell, ayer salió también el nombre de Sherone Simpson, velocista y medallista olímpica en Londres 2012. Y hace algunas semanas recordaréis el positivo de otra medallista jamaicana, Veronica Campbell-Brown, junto al de otros atletas de este país como Dominique Blake y meses atrás el de Steve Mullings. Todas estas malas noticias están sembrando la duda sobre el éxito de Jamaica en las discplinas de velocidad, de las que son los auténticos reyes.
De ahí que en estos momentos, a menos de un mes del Mundial de Moscú que empieza el 10 de agosto, el atletismo se tambalee. Y es que siempre que los escándalos de dopaje afectan a grandes nombres, a los aficionados no nos queda otra que dudar porque creer en estos grandes campeones del deporte empieza a ser ya una cuestión de fe, vista que a la larga, tarde o temprano, un amplio porcentaje terminan por decepcionar.