David (Haye) derrota a Goliath (Valuev) y se proclama campeón del mundo de los pesos pesados

La velada del domingo era más que un combate de boxeo. Se trataba de un duelo de contrastes entre un gigante ruso de 2’13m. de altura, el campeón más alto de la historia, y un inglés que apenas le llega a los hombros. El ruso, un titán que semeja una bestia furibunda, haciendo honor a los rumores de que desciende de un gigante mongol, pero desde cerca destaca en poesía y se declara ávido lector de Tolstoi. Un inglés, en principio, vocinglero y fanfarrón, pero que se ruboriza cuando alguien menciona su nombre junto al de su gran ídolo, Mohammad Alí.

Ante esta tesitura, el del domingo era un combate que había que ver, y más aún tras las provocativas declaraciones de Haye en semanas previas que hacían prever un duelo explosivo, pero nada más lejos de la realidad. El enfrentamiento entre Haye y Valuev nos deparó un combate táctico, en el que el ruso buscó aprovechar su gran envergadura, pero con un Haye mentalmente muy preparado que supo evitar las distancias y mantener el combate donde a él le interesa, en un ida y vuelta rápido, donde aprovechó su velocidad para conectar puñetazos en el rostro de Valuev, picando una y otra vez hasta romperse la mano, literalmente, pero aún así puntuando sin parar acercándose más y más al título.

Ante este combate, Valuev se mostró firme, sin dar la impresión de caer, pero incapaz de responder al intercambio de su adversario con su clásico 1-2, entrando con el jab de izquierda para demoler con la derecha, conexión que apenas mostró ayer. Con el paso de los asaltos, la mejor forma física del británico unida a la edad del ruso (36 años) que manifestaría que había sido «como un maratón para mí, no estaba preparado para correr tanto», terminaría por dejar claro un combate que terminó decidiéndose por los puntos (114-114, 112-116 y 112-116) a favor de David Haye, quien se proclamó nuevo campeón del mundo de los pesos pesados por la AMB.

Ahora, Haye tendrá que prepararse para el enfrentamiento obligado ante el aspirante oficial de la AMB, su compatriota John Ruiz, a quien espera derrotar para medir lo antes posible sus fuerzas con el ucraniano Vitali Klitschko, campeón mundial por la CMB, quien ya le espera.

Vía | AS

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