David Moncoutie, un pequeño homenaje a un pequeño ganador
La llegada a Madrid en el día de ayer no sólo supuso el final de la Vuelta a España 2012. Para algunos, como David Moncoutie, supuso también el final de su carrera deportiva profesional. Ayer, este menudo ciclista francés dio sus últimas pedaladas como ciclista, y precisamente las dio en España y en la Vuelta, la carrera en la que mejor rendimiento dio y el lugar donde más éxitos cosechó.
Por eso, y aunque no fuera el único ciclista que ayer dijo adiós al profesionalismo, queremos rendir nuestro pequeño homenaje a este ciclista menos conocido ya que no es de los llamados grandes, pero que ha tenido sus momentos de brillantez. Un ciclista peculiar además este Moncoutie porque desde que comenzó su carrera, allá por 1997, siempre ha corrido para el mismo equipo, Cofidis, algo que es bastante raro de encontrar en el ciclismo.
Como decíamos, la carrera de Moncoucou comenzó en 1997, cuando tenía 22 años. Realmente, no montó en bicicleta hasta los 16 años y hasta los 19 no se decantó definitivamente por el deporte de las dos ruedas. Ya entonces, en sus primeros años, mostró su carácter tímido y ese estilo particular que tenía entonces y sigue teniendo de correr, el de estar delante o simplemente dejarse llevar si las cosas no van con él.
Su primer triunfo llegó en 1999 aunque su primer gran año fue el de 2002, cuando finalizó el 13º en el Tour de Francia y fue segundo en el campeonato francés de contrarreloj. En ese momento quizá vieron en Moncoutie a un posible ganador de grandes vueltas, pero pronto se vio que el ciclista francés no tenía las aptitudes, y a veces las actitudes, necesarias como para conseguir éxitos mayores que una etapa.
Y en eso se especializó, en cazar etapas en largas escapadas. Así consiguió dos triunfos en el Tour de Francia y así consiguió cuatro etapas en la Vuelta a España (2008, 2009, 2010 y 2011), entre otros éxitos. En esta última carrera además consiguió algo que ningún otro ciclista ha conseguido, ganar cuatro veces la clasificación de la montaña, y además durante cuatro años consecutivos, desde 2008 hasta 2011. Y difícil parece por ahora que se repita esta gesta.
De ahí el idilio que tiene este ciclista con nuestro país y lo bien que se ha sentido siempre en él. Un Moncoutie, y ya terminamos, que para ser más peculiar no se ha llegado nunca a ver salpicado por el dopaje o por las sospechas. Ni siquiera cuando en el año 2004 se dieron varios casos de positivos dentro del equipo, entre ellos el de David Millar. Hasta para eso parece que Moncoutie fue especial.