El Este se llevo el partido de las estrellas

La madrugada de ayer puso el punto y final a la fiesta de la NBA. Y como suele ocurrir año tras año con un espectacular partido entre los mejores jugadores del mundo. Ayer nos deleitaron con un encuentro muy igualado hasta el final, el colofón perfecto para el All Star.

Ganó la Conferencia Este (128- 134) con dos nombres propios que brillaron más que el resto. Ray Allen y su muñeca prodigiosa. Anotó 28 puntos y dio un festival de triples. Además fue decisivo en el último cuarto, anotando dos triples consecutivos que fueron claves en la victoria de su equipo. Sin duda alguna hubiese sido el MVP del partido si no hubiese compartido equipo con LeBron James. Estuvo apunto de conseguir un triple doble (27 puntos, 9 asistencias y 8 rebotes). Hasta el momento sólo Jordan ha sido capaz de hacerlo en un partido del All Star. Y se ganó al público con una amplia colección de mates y penetraciones marca de la casa durante todo el partido.

El gran ausente del partido fue el MVP del año pasado, Kobe Bryant, compañero de Gasol en los Lakers. Disputó tan sólo dos minutos de titular y luego fue sustituido para no volver a saltar a la pista. Su lesión en el dedo obligo a esta circunstancia.

En este partido da igual quien gane, lo importante es el espectáculo y las acciones individuales, cuanto más espectaculares mejor. Por ello las defensas no se emplean a fondo y el marcador es tan abultado. Fue sin duda el cierre perfecto a este fin de semana mágico en New Orleans.

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