Entrevista con Gonzalo Higuaín, jugador del Real Madrid

Gonzalo Higuaín ha sido, aunque a muchos les pese, uno de los hombres más decisivos del Real Madrid de las dos últimas temporadas. El argentino llegó al Madrid muy joven y en categoría de salvador para un equipo que no atravesaba su mejor momento. Estaba claro que Higuaín todavía no estaba preparado para eso y su falta de puntería ante el gol le conllevó muchas críticas. Sin embargo, el argentino continuó trabajando y poco a poco con esfuerzo se fue ganando un puesto, la confianza del público y sus goles acabaron llegando.

Este año, el ‘pipita’ lo tendrá difícil para jugar, ya que son muchos los jugadores que han llegado especialmente en la delantera. El argentino tendrá que luchar de nuevo con viejos conocidos como Raúl o Van Nistelrooy (si acaba quedándose) a los que ahora se suman hombres como Cristiano Ronaldo o Benzema. En la entrevista que podéis leer después del salto, Higuaín habla tanto de su llegada al Real Madrid y los años vividos aquí así como de la manera en la que afronta la siguiente temporada.

Pregunta. Nació en Francia. ¿Le queda algo de francés?

Respuesta. No porque me crié en Argentina y en River. Soy argentino cien por cien, de raza, actitud, esa que siempre te hace buscar todo lo que te propones.

P. ¿Qué infancia ha tenido?

R. Me la pasé jugando al fútbol, a partir de los ocho años en el baby del club Palermo.

P. ¿Qué es el baby?

R. Es una especie de fútbol sala. Era como un equipo de barrio en el que nos juntábamos varias categorías. Y como de pequeños el fútbol once era muy grande pues jugábamos menos y en un campo más pequeño. Teníamos un campeonato, al terminar eso pasé al fútbol once.

P. ¿Siempre quiso ser futbolista?

R. Sí, mi padre era futbolista, siempre estaba viendo fútbol y me lo inculcó desde chiquitito. En el patio de casa estaba siempre con mis hermanos y era fútbol y fútbol y fútbol…

P. ¿Tiene algún recuerdo especial de aquella época?

R. Mi padre fue campeón con River en 1992, yo tenía 5 años, me llevó con él, me metió en la cancha y se me quedó grabado.

P. ¿Siempre jugó de delantero?

R. En las categorías inferiores jugaba de enganche… Mi posición natural ahora es delantero, pero también me gusta jugar detrás del punta.

P. ¿Por eso es tan imprevisible en el campo?

R. Generalmente el entrenador me da libertad para jugar donde quiera en la parte de ataque y eso a mí me viene bien porque me siento muy cómodo, es lo que me gusta hacer.

P. ¿En la banda también? Le han sacrificado durante dos años y medio y nunca se ha quejado.

R. Sí, pero es que tenía tantas ganas de jugar que me daba igual donde fuera, además es una posición que tampoco me desorbitaba mucho.

P. Lo ha aceptado sin quejarse. Desde fuera parece que no pelea.

R. Soy una persona que trabaja y lucha pero a la vez soy muy tranquilo, es muy difícil que demuestre mis emociones. No me gusta hacerlo. Y sí que me enfado, pero más conmigo mismo cuando no me salen las cosas o cuando fallo ocasiones de gol.

P. Chuta con mucha potencia, casi siempre hacia abajo. ¿Cómo consigue pegarle tan bien a la pelota?

R. En el golpeo no hay más misterio que el entrenamiento. Siempre lo he trabajado mucho, desde las categorías inferiores en River.

P. Le costaba marcar al principio. ¿Había algo que le frenaba?

R. Vine con 18 años, tampoco tenía muchos partidos en Primera, ni una base muy hecha como para saltar al fútbol europeo… Vine sin ser una figura emblemática sino una persona normal que el Madrid fichó para el futuro, y fue tirarme a la cancha sin haber entrenado mucho con mis compañeros y jugármela.

P. ¿Le dolían las críticas?

R. Un poco sí. Quizás me frenaba el hecho de que me compararan con Ronaldo, un jugador muy consagrado mientras yo acababa de empezar.

P. ¿Qué le ha hecho cambiar?

R. La confianza en mí mismo. Yo siempre la tengo, pero cuando me la dan los demás me salen mejor las cosas.

P. Schuster no tenía demasiada confianza en usted.

R. Por eso digo, si no la encuentro la tengo que poner de mi parte.

P. Ha ganado seguridad en el campo.

R. Sí, pero no es sólo una cosa futbolística, he madurado también fuera. Me vine aquí con 18 años, dejé todo en Argentina, y eso de no estar con tus padres te hace crecer a una velocidad mucho más rápida. Tienes que ser independiente, pensar en muchas más cosas. Y si lo dejas todo para venir a jugártela, pues no va a ser para tontear sino para trabajar y luchar.

P. ¿Cree que el hecho de no ser una figura mediática le va a perjudicar?

R. Lo que sé es que todos arrancamos de cero y que va a jugar el que mejor esté.

P. ¿No tiene la sensación de que Higuáin siempre tiene que demostrar más que los demás?

R. A mí me gustan los desafíos, eso de convencer al técnico a los compañeros y a los amigos de que puedo jugar en el Real Madrid.

P. ¿En qué jugadores se ha fijado a lo largo de su carrera?

R. En Ortega, Gallardo, Salas y Francescoli.

P. ¿Hay algo de Benzema, Van Nistelrooy y Raúl que le gustaría tener?

R. De Benzema nada porque somos parecidos y tiene mi edad. De Van Nistelrooy y Raúl su carrera futbolística.

Vía | El País

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