Golpe sobre la mesa de Chris Bosh
Toronto Raptors está siendo un desastre defensivo. Permite una media de 110 puntos por partido y pese a que anota en grandes cantidades, contrarrestar 110 puntos es muy difícil. El otro día Atlanta Hawks recibió 113 puntos de los Raptors, pero ellos anotaron 143 para ganar el partido por 30 de diferencia, con 72 puntos en la primera mitad.
Tras ese partido Jarret Jack y Chris Bosh salieron a la palestra a quejarse públicamente de la falta de actitud defensiva de su equipo y de lo mal que lo están haciendo atrás. Algunos periódicos lo catalogaron de rajada, igual que catalogaron de rajada lo que Marc Gasol dijo el año pasado sobre que el equipo no tenía carácter y que se excusaba en su juventud para justificar las derrotas: pues bien, ambas rajadas han llevado consigo una mejora sustancial del equipo.
Tras la debacle de Atlanta Toronto Raptors venció a domicilio a Washington 109 a 107 con una mejora defensiva ya que esos 107 puntos incluyen una prórroga. Pero la buena noticia viene tras la increíble victoria en Chicago, a domicilio, por 78 a 110. 39% de tiros de campo para el equipo local (parte desacierto, parte intensidad defensiva) para completar el mejor partido en defensa de los Raptors. Un golpe de autoridad del jugador que tiene que liderar a este equipo, que tiene que tirar de él y hacerlo más grande, más competitivo.
Es cierto que está luchando a base de bien en busca de su contrato, pero un jugador necesita que su equipo gane partidos para que se revalorice. Liderar la NBA en dobles dobles (vaya con Bosh…) es un gran acierto personal, pero si quieres irte a La Gran Manzana con LeBron vas a necesitar demostrar que tienes algo más ahí dentro.
Vía | NBA