Javier Fernández, campeón del mundo en Shanghai 2015

Este fin de semana, el deporte español tenía una cita importante: el Campeonato del Mundo de Patinaje Artístico. Esta cita en Shanghai, China, habitualmente hubiera pasado desapercibida en nuestro país y, sin embargo, va a quedar marcada para siempre en la memoria deportiva española por el triunfo de Javier Fernández.

Por primera vez en la historia del deporte español, tenemos un campeón del mundo en patinaje artístico. Para ello, este joven madrileño tuvo que salir de su casa, dejar España y entrenar en el extranjero. Todo el esfuerzo, desde los 15 años, encontraron su premio definitivamente en Shanghai, colgándose su primer oro mundial, que probablemente no sea el último.

Tras conseguir la hazaña, pocas veces lograda, de ganar tres Europeos consecutivos, Javier Fernández llegaba a este Mundial de nuevo con las máximas aspiraciones. Tras dos bronces en los dos últimos años, el español quería ir más allá y apostar directamente por el oro, aunque para ello tenía que vérselas con Yuzuru Hanyu, compañero de entrenamientos y amigo, pero también campeón mundial y campeón olímpico.

Después del programa corto, las cosas estaban claras: Hanyu, con 95’20 puntos, demostraba que era el rival a batir y Súper Javi, con 92’74 puntos, el único que podría conseguirlo. En el programa libre, las puertas a la medalla de oro se abrieran después de que Hanyu sólo lograra 175’88 puntos despés de un ejercicio con varios fallos graves. Con un total de 271’puntos, la medalla de oro se presentaba dentro de las posibilidades.

Los nervios jugaron una mala pasada al inicio al patinador español, pero supo resarcirse y a partir de ahí realizar una interpretación casi perfecta para sumar 181’16 puntos, alcanzando un total de 273’90 puntos que valían una medalla de oro. Curiosamente, fue un concurso, en general, peor que el del año pasado, pero que le ha valido esta vez para poder decir que es el mejor del mundo.

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