Liga de Campeones 2009/10: empate a 2 entre Arsenal y Barcelona

A veces el fútbol es impredecible e increíble. Increíble fue que el Barcelona no marcara en la primera mitad, increíble fue que acabaran en gol las dos primeras que tuvo en la segunda parte e increíble, e imprevisible, fue que el Arsenal remontara el 0-2 y salvara el empate. Un empate que deja un partido de vuelta que se presumía resuelto más igualado que nunca, y en el que no estarán ni Cesc Fabregas, ni Puyol ni Piqué.

Probablemente el Barça de los primeros 20 minutos ha sido una de las mejores versiones azulgrana de la temporada, y sin embargo no lograron batir a Manuel Almunia. El ritmo bajó conforme pasó el tiempo, pero al Arsenal no le salía nada a derechas. Era incapaz de tener el balón, y además perdía por lesión a Arshavin, sustitutido por un lateral como Eboue, y Gallas. La única llegada clara de los gunners fue un doble remate de Bendtner, invalidados por fuera de juego claro del danés.

El 0-0 duró muy poco en la segunda mitad. En la primera acción tras la reanudación, Piqué mandó un balón a la espalda de la defensa del Arsenal que recogió Ibrahimovic, y el sueco batió con una efectiva vaselina la media salida que había hecho Almunia. La respuesta del Arsenal no se hizo esperar, pero ahí estaba Valdés para desviar el cabezazo de Bendtner. Entonces, Xavi volvió a buscar a Ibrahimovic, la defensa inglesa volvió a fallar y esta vez el sueco resolvió fusilando a Almunia, que lo esperaba bajo palos.

Por delante más de media hora, 0-2 en el marcador y una aplastante sensación de superioridad, pero hasta ahí. El equipo de Guardiola bajó el pistón y cometió errores que dieron vida al Arsenal. También dio vida la entrada de Theo Walcott, que en la primera jugada ya superaba con facilidad la marca de Maxwell, era un aviso. A la siguiente vez que le ganó la espalda, en el 69′, el extremo británico se plantó sólo ante Valdés y no falló en la definición para colocar el 1-2.

El Emirates empezó a empujar y Guardiola no encontró la solución en el banquillo, pese a tirar de Henry, que apenas salió para llevarse una ovación de la que fue su afición. Y de un mano a mano que desperdició Messi, se pasó al gol del empate para el Arsenal. Empate que llegó tras un discutible penalty de Puyol sobvre Cesc Fabregas y que transformaría el capitán de los gunners. Puyol vería la roja y el Barça se quedaba con 10, pero Cesc se lesionaba al lanzar el penalty y, con los cambios agotados, se quedaba en el campo para hacer bulto.

Al final al Barça se vuelve de Londres con un sabor bastante agrio, ya que tenía las semifinales a tiro y ahora tendrá que ganarselas en 90 minutos en Barcelona. Además, tras la roja de Puyol y la amarilla de Piqué con la que cumple ciclo, la defensa azulgrana se queda en cuadro para ese partido. Tampoco estará Fabregas.

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