Lucas Alcaraz inicia su tercera etapa en el Granada

Cuando vuelva la liga española de Primera División, ahora de parón para la disputa de partidos de selecciones, se estrenarán dos técnicos en la categoría con sus nuevos equipos. Uno será Cesare Prandelli, nuevo entrenador del Valencia, y el otro será Lucas Alcaraz, nuevo entrenador del Granada Club de Fútbol.

Alcaraz dirigió al Granada entre 1995 y 1998 y luego entre 2013 y 2014

Eso sí, para Alcaraz, dirigir a un equipo de Primera División no es algo nuevo y mucho menos si se trata del Granada. Nacido en la ciudad y criado en la pasión por los colores rojiblancos, será la tercera etapa de Alcaraz como entrenador del equipo nazarí, después de haberlo dirigido muchos años ya atrás, con el equipo en Segunda B, y más recientemente ya con el equipo en la élite.

Su amor declarado por el Granada y su última labor al frente del equipo son dos factores importantes a la hora de apostar por Alcaraz. De hecho, el técnico andaluz es el único que puede decir que ha «salvado» al Granada con antelación (lo hizo en la 2012-2013, cuando el equipo afrontó las dos últimas jornadas ya con la permanencia amarrada) y el único que ha aguantado una temporada entera en el banquillo en esta etapa en Primera División.

Fabri, Abel Resino, Anquela, Joaquín Caparrós, Sandoval, José González, Paco Jémez … El Granada afronta su sexta temporada consecutiva desde el último ascenso a Primera y todo este camino ha estado marcado por la inestabilidad en el banquillo. De ahí que se confíe en el único hombre que ha sido capaz de agarrarse las 38 jornadas al mismo, aunque resulte paradójico y sorprendente hacerlo ahora.
Alcaraz es un técnico de ideas muy diferentes a las de Jémez, por lo que el proyecto tendrá que renovarse

Y es que Alcaraz llega para sustituir a Paco Jémez, un técnico con una apuesta futbolística bastante distante de la suele manejar el granadino. A eso hay que añadir que, supuestamente, la plantilla está confeccionada con jugadores que se adaptarían mejor a lo que precisa Jémez que a lo que precisa Alcaraz, y que ahora estos tendrán que responder a un nuevo plan de trabajo, al punto de que no sería de extrañar de que en diciembre hubiere muchos cambios en el plantel si el rumbo no se endereza.

Pero la situación en Granada es límite, la más preocupante que se recuerda: 2 puntos de 21 posibles y todavía por jugar con los equipos de la zona alta. De ahí a que se haya recurrido al granadinismo de un Alcaraz que tendrá que empezar a reconstruir este equipo desde atrás (no vendría mal dejar de ser el más goleado) en pos de un nuevo milagro en otra temporada que será de sufrimiento para el seguidor granadino.

Vía | Granada CF

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