Luis Enrique firma por el Celta por dos temporadas
Por un lado, Abel Resino es un entrenador con suerte. Salvó de la quema al Granada la temporada pasada en el último suspiro y este año ha hecho lo mismo con el Celta de Vigo. Con mucha suerte además. Pero por otro lado, no se puede decir que le vayan bien las cosas porque luego no consigue asentarse en esos clubes que ha salvado y ni siquiera empieza la temporada.
Parecía que con el Celta iba a ser así y que iba a comenzar con el equipo vigués la temporada de cero. Pero ayer, por sorpresa, se anunciaban dos cosas desde Galicia. Una, que Abel Resino y el Celta de Vigo rompían sus relaciones, y dos, que Luis Enrique era el nuevo entrenador del equipo gallego para las próximas dos temporadas.
El asturiano ha firmado con el Celta por dos temporadas. Una opción que en principio ha agradado a la afición ya que Luis Enrique es un técnico con un buen cartel. Le pesa su año en la Roma sí, pero no se puede decir que le fueran del todo mal las cosas (Zeman este año no lo ha hecho mucho mejor) y el problema quizá fue más de las expectativas con las que llegó, que eran altísimas.
De su experiencia en el Barcelona B, Luis Enrique ha demostrado que es un técnico que sabe trabajar la cantera y la gente joven. Y quizá haya sido eso lo que ha hecho que se rompieran las relaciones entre el Celta de Vigo y Abel. Resino pediría fichajes, y más para cubrir las más que posibles salidas de puntales como Iago Aspas, y el Celta lo que quiere es tirar de cantera.
Para eso llega Luis Enrique. Para eso y para otras muchas cosas como por ejemplo, servir de gancho a la afición (pese a un año sabático, el nombre de Luis Enrique tiene tirón, o al menos más que el de Abel que no casó mucho con Balaídos), o servir de gancho para la llegada de algunos jugadores desde La Masía, en donde ha puesto sus ojos la dirección deportiva del Celta para reforzar el equipo.