La mala suerte de Esteban Granero en la Real Sociedad
Dicen que las malas noticias nunca vienen solas, y este refrán es aplicable a la Real Sociedad. El conjunto txuri-urdin se estrenaba este martes en la Liga de Campeones, competición que como tal juega por segunda vez en su historia, pero lo hizo con mal sabor de boca porque perdió con el Shakhtar Donetsk ucraniano y además vio como uno de sus jugadores decía prácticamente adiós para el resto de la temporada.
Cuando Esteban Granero salía del césped de Anoeta en camilla, era para temerse lo peor. Los peroes pronósticos apuntaban entonces a lesión grave de rodilla y los exámenes médicos realizados al día siguiente confirmaban lo que nadie quería oír: que la rodilla de Granero había hecho crack. Rotura del ligamento cruzado anterior y lesión de menisco interna era el parte médico tras la resonancia magnética.
Granero ni siquiera había sido titular en ese partido, sino que entró desde el banquillo sustituyendo a Rubén Pardo. La lesión llegó en los últimos minutos del encuentro, cuando ya el marcador era de 0-2 para el equipo ucraniano, y se la produjo solo, de forma totalmente fortuita. Un cúmulo de desafortunadas circunstancias que han truncando este su primer año en la Real Sociedad.
Hace un mes, aproximadamente, el equipo donostiarra confirmaba que Granero iba a jugar de blanquiazul esta temporada, cedido por el Queens Park Rangers. Aunque en la Premier League no le habían ido del todo bien las cosas, la incorporación de Granero había levantado expectación en la parroquia realista , pues todos pensaban que era una buena opción para reforzar el medio campo, algo cojo tras la marcha de Illarramendi.
Pero sin embargo Granero apenas ha jugado unos ratitos, y ahora para colmo le llega esta lesión que le va a tener apartado varios meses, probablemente lo que resta de temporada si la recuperación no va del todo bien. El sueño de Granero de reencontrarse como futbolista se trunca, y los problemas aumentan para Jagoba Arrasate, que tiene que lidiar con una plantilla corta y con muchos partidos por delante.