NBA: los Bucks terminan el curso sin Carter Williams ni Mayo
Todo el mundo pensaba que los Bucks esta temporada iban a ser un hueso duro de roer. Si el año pasado, pese a la lesión de Jabari Parker y pese a no contar con un pívot de garantías, llegaron a meterse en playoffs y le dieron guerra en primera ronda a unos Bulls que necesitaron del séptimo, ¿qué no iban a hacer en esta temporada?
Sin embargo, la realidad ha sido diferente de los pronósticos y los jóvenes Bucks no han estado a la altura de lo esperado. Si bien es cierto que la evolución de Parker y la de Middleton va por los cauces correctos y que Antetokoumpo sigue mejorando en todos las facetas y ahora mismo no se le ve techo, también es cierto que los resultados no han acompañado.
Y si los que tenían que mejorar lo han hecho, si el equipo no mejora es porque realmente el resto aporta menos. Si bien hay más causas que explican la temporada de los Bucks (más competitividad en el Este, se echa en falta a jugadores de rol como Dudley o Pachulia, que se marcharon, lesiones y ausencias, etc …), el bajo rendimiento de ciertos jugadores ha sido clave, especialmente los casos de Michael Carter Williams y O.J. Mayo, jugadores que además no jugarán lo que queda de curso por lesión.
Carter Williams no está resultando el base que los Bucks lo esperaban. Parecía un buen movimiento su llegada en sustitución de un Brandon Knight que no estaba por la labor de renovar, pero el que fuera rookie del año en 2014 y que mostrara tantas virtudes en los Sixers está mostrando en Milwaukee sus carencias: poco acierto en el tiro, mala dirección y malas decisiones que acarrean pérdidas. De ahí que sus números vayan a menos.
MCW se perderá el resto del curso al igual que O.J. Mayo, que según la versión oficial se rompió el tobillo al caerse en las escaleras de su casa. Mayo llegó con altas pretensiones a la NBA (número 3 del draft de 2008) y, quitando su año rookie, su carrera ha ido en una peligrosa línea decreciente. Esta temporada la finiquitará con los peores números de su carrera para salir a la agencia libre este verano.
Los Bucks ya andan en puestos de lotería y esa situación difícilmente cambie de aquí a final de temporada. Sin más objetivos para este curso, en Milwaukee ya sólo esperan ver seguir creciendo a sus jóvenes jugadores y, quizá, afrontar el próximo curso con unas expectativas más bajas para evitar el regusto de decepción que ha dejado esta temporada.
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