NBA: Covington, de no drafteado a millonario

Hay muchos jugadores en la NBA que llegaron a hacer carrera en la liga sin haber sido drafteados. A la cabeza se nos vienen nombres como John Starks, Ben Wallace o Bruce Bowen, así como J.J Barea, Jeremy Lin, José Calderón o Wesley Matthews, estos todavía en activo. El protagonista de esta historia, Robert Covington, también está ya por pleno derecho en esta lista con ilustres nombres.

Covington no fue drafteado y pasó sin pena ni gloria por los Rockets

Covington pasó de largo por el draft del año 2013, la generación que lideró el desafortunado Anthony Bennett. Pero el jugador que había salido de la Universidad de Tennessee tuvo la oportunidad de debutar en la NBA y disputar algunos partidos con los Houston Rockets, equipo que le firmaría y le despediría al año siguiente, después de que Covington sólo disputara siete encuentros.

La mayor parte del curso se la pasó el nacido en Illinois en la D-League, jugando para los Rio Grande Valley Vipers y llegando y siendo uno de los mejores jugadores de la competición, después de promediar 23 puntos y 9 rebotes en la campaña. Esta actuación le convirtió en un objetivo perfecto para los Sixers, que lo contrataron en noviembre de 2014, todavía sin saber que estaban contratando a alguien vital para The Process.

Aquellos Sixers a los que no les importaba perder partidos contrataban a jugadores con cierto potencial pero sin cartel alguno a bajo costo. Si salían mal, no tenían nada que perder porque ese era el objetivo, pero si salían bien … Y Robert Covington salió muy pero que muy bien, promediando más de diez puntos por campaña en sus tres años con los Sixers y, sobre todo, siendo un jugador muy importante para la defensa.

El alero ha conseguido subir su sueldo en 15 millones de una tacada

Alero capaz de defender a varios perfiles de jugador y con muy buena mano desde la línea de tres, Covington es hoy día una pieza clave del equipo de Philadelphia. Así, ha pasado de no salir en el draft a ser un nuevo millonario en la NBA, pues los 76ers no han dudado en ofrecerle un nuevo contrato a la altura de lo que se merece: 62 millones de dólares por los próximos cuatro años.

Con espacio salarial de sobra, los Sixers evitan que Covington salga a la agencia libre, donde al jugador no le iban a faltar novias, pues su labor en la cancha es de las más cotizadas. Y con ello además rompen un récord, porque Covington hasta la fecha cobraba unos «pírricos» 1’5 millones de dólares por temporada, consiguiendo así la mayor subida de sueldo en un contrato de la NBA.

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