NBA Finals 2011: Dallas Mavericks, campeones de la NBA por primera vez en su historia
Cuando tres estrellas de la liga recalaron en el mismo equipo, una de ellas, Lebron James, afirmó que ese día comenzaba una nueva era en el baloncesto y que iban a ganar los próximos 6-7 títulos de la NBA. Ese equipo, Miami Heat, ha demostrado que va a ser el favorito para ganar año tras año, pero otro equipo, Dallas Mavericks, ha demostrado que se le puede batir y usando un arma que no tienen los de Florida: el juego en equipo. La nueva era tendrá que esperar un año más.
Emocionante sexto partido y gran victoria de Dallas por 95-105 en un American Airlines Arena que enmudeció conforme pasaba la segunda mitad. Los Mavs fueron mejor en muchos aspectos, mejor tiro exterior, mejores en los tiros libres y sobre todo, mejor banquillo. Si ya sorprende ver a secundarios como Cardinal o Mahinmi jugando una final de la NBA, más sorprendente es verlos asumir su rol de tal grado y hacer las cosas muy bien. Trabajo de Carlisle al que no hemos tratado muy bien, y que ha demostrado mejor mano que nunca.
El mejor del banquillo tejano, y del partido de ayer, fue Jason Terry (27 puntos). El escolta de los Mavs salió en el primer cuarto cuando peor le iba a su equipo, perdiendo ante el empuje anotador de Lebron James (21 puntos), para que Dallas pasara de perder de 9 a ganar de esa diferencia en un primer cuarto espectacular. Esa diferencia subió hasta 12 puntos en un segundo cuarto marcado por una tangana, aunque un gran arreón de los Heat los llevó a igualar el marcador al descanso.
Y todavía no había aparecido Dirk Nowitzky (21 puntos y 11 rebotes), y ese es el mayor miedo que tenían en Miami. El alemán no tardó en hacerlo, al inicio del tercer periodo y llevó a su equipo a una ventaja de 9 puntos, que se estabilizó durante muchos minutos. Los Heat bajaban el culo y defendían duro, pero no podían frenar la circulación de balón de Dallas, mientras que en ataque se atascaban ante una defensa en zona y sólo el talento de sus estrellas los mantenía vivos.
Todos los partidos que ganó Dallas hasta ahora, llegó al último cuarto perdiendo y tuvo que remontar. Ahora le tocó otro papel, el de administrar y lo hizo de cine. Nowitzky tomó el mando de operaciones en ataque y respondió con acierto ante Bosh (19 puntos y 8 rebotes), el más acertado de Miami y desaparecido en el último cuarto, olvidado por las otras dos puntas del tridente. Wade (17 puntos y 8 rebotes) fue quien intentó tirar del carro, y en su esfuerzo sumó más pérdidas de balón, en una mala toma de decisiones fruto de la desesperación final.
Dallas había ganado este partido antes de que el tiempo terminara, y el MVP de la final, no podía ser otro que Dirk Nowitzky, huía a vestuarios para comenzar a creer lo que él y sus compañeros habían conseguido. Tampoco se lo creía el Kidd que jugó y perdió dos finales con los Nets, el Stojakovic de los inolvidables Kings que nunca ganaron nada, el Marion de los mejores Suns que se recuerdan y que tampoco tocaron gloria. Por eso, en el fondo, todos o casi todos iban un poquito con Dallas, porque sencillamente lo merecían, la historia les debía una a muchos de ellos. Y finalmente, se lo ganaron, vaya si se lo ganaron.
Vía | NBA
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2 comentarios
«Dallas Mavericks, ha demostrado que se le puede batir y usando un arma que no tienen los de Florida: el juego en equipo». Esa es la frase que ha marcado estas finales.
Esta final ha dejado varias cosas claras: que Lebron no es Michael, porque este si que aparecía en las finales dejando huella. James ya es la segunda que pierde. La segunda viene en alusión al primer párrafo, el juego en equipo siempre perdurará por delante de las individualidades. Como ha dicho el propietario de Cleveland: Una vieja lección para todos: NO EXISTEN LOS ATAJOS. NINGUNO”
Como leí en twitter: Con LeBron se van a cebar. En USA se perdona la soberbia, el histrionismo… pero no la derrota, y ya ha perdido dos Finales.
Una cura de humildad a Miami de cara al futuro no les va a venir mal.
Los Mavericks dederán defender su titulo ante el Parathinaikos de Atenas