NBA Finals 2011: tercera victoria para Dallas que está a un partido de ganar el anillo
Quedan dos partidos a jugar en Miami, y a Dallas Mavericks le vale con ganar uno de ellos para conquistar su primer título de la NBA. En el partido más ofensivo de lo que llevamos de serie, e igual de divertido que los demás, el equipo tejano ganó por 112-103 a los Heat, por tanto, suma su tercera victoria y se queda a sólo una de ganar el anillo. Los de Carlisle van a volver a Florida con los deberes hechos.
Y es que los Mavericks fueron un señor equipo en el que cada uno tenía claro su función, dentro del quinteto titular, y contó además con dos microondas desde el banquillo: Jason Terry (21 puntos, 4 rebotes y 6 asistencias) y José Juan Barea (17 puntos y 5 asistencias). En Miami, en cambio, Lebron James (17 puntos, 10 rebotes, y 10 asistencias) volvió a firmar un mal partido pese a su triple doble, y Dwyane Wade (23 puntos y 8 asistencias) tiró del carro lo que las fuerzas le dejaron.
Hubo alternativas constantes en el marcador durante todo el partido, pero en líneas generales, fue Miami Heat quien lo pasó peor en el partido, sobre todo por la lesión de Wade. Con el escolta fuera durante algunos minutos por un golpe en la cadera tras un choque con Brian Cardinal, Miami sobrevivía gracias a acciones intermitentes de Lebron, de Chris Bosh (19 puntos y 10 rebotes) y también de Mario Chalmers (15 puntos), clave con sus triples en la primera mitad para evitar el despegue de los Mavs.
Con eso, Miami se mantenía vivo en el partido, mientras que a Dallas le bastaba con otra sobresaliente actuación de Dirk Nowitzky (29 puntos y 6 rebotes) para llegar a conseguir incluso 9 puntos de ventaja durante el tercer cuarto, la máxima diferencia del partido. Eso sí, a base de una aguerrida y efectiva defensa, el parcial durante el inicio del último y decisivo cuarto fue favorable a los Heat, que incluso tomaron la delantera a sólo cinco minutos para el final.
Los Mavericks están demostrando que saben jugar mejor los minutos finales, gracias a contar con un base puro como Jason Kidd (13 puntos y 6 asistencias) entre otras virtudes, y ayer volvieron a dominar este tramo de partido. Un triple de Kidd y otro de Terry, un in your face sobre James a 30 segundos para el final, pusieron la puntilla, y es que los Mavs también fueron mejor desde el exterior, con un 68’4% de acierto. En dos partidos, Dallas le ha dado la vuelta a la tortilla y tienen la sartén por el mango.
Vía | NBA