El polémico Christian Valde Velde se retira del ciclismo
Con la temporada ciclista tornado a su fin, es el momento de ir recopilando poco a poco a los ciclistas que ya no veremos para 2014 en el pelotón, a los veteranos que se retiran. Ya os contamos en su momento que el español Juan Antonio Flecha lo dejaba a sus 34 años, pese a tener ofertas para seguir, y ahora nos vamos a ocupar de otro ciclista que lo deja, Christian Vande Velde.
La trayectoria de este ciclista norteamericano comenzó a forjarse, como la de sus paisanos de la época, en el US Postal. Su primer año en el equipo fue 1998, y ya participó como gregario de Lance Armstrong en la Vuelta a España, con el tejano terminando en cuarto lugar. Al año siguiente, Vande Velde se convertía en el mejor joven del Tour de Francia, aunque hay que señalar que terminó en el puesto 85.
Tras varios años en la formación americana, el ciclista nacido en Illinois ficharía por un equipo español, el Liberty Seguros de Manolo Sáiz, donde sólo permaneció un año, y luego al CSC de Bjarne Riis. De esa época, de 2004 a 2006, Vande Velde tiene sus resultados anulados tras confesar haberse dopado. Fue uno de los que delató a su ex-compañero Lance Armstrong en la investigación que llevó a cabo la USADA.
Curiosamente, fue a partir de que corrió limpio, según el testimonio de Vande Velde, cuando llegaron sus mejores resultados. Enrolado en ese equipo adalid de la lucha anti dopaje, el Garmin dirigido por el dopado confeso Jonathan Vaughters, el americano se coló por dos años consecutivos en el top 10 del Tour, cuarto en 2008 y séptimo en 2009, y consiguió una victoria en una etapa de la París – Niza, que es de lo más destacadito en su escaso palmarés.
En 2010, con 34 años, llegó incluso a correr las tres grandes, aunque abandonó en Giro y Tour, y al año siguiendo se marcó un más que respetable 16º lugar en la ronda francesa. Su papel en estos últimos años en el equipo fue decreciendo en importancia, aunque siguió corriendo grandes vueltas y corriendo carreras importantes, prueba de que para su director Vaughters Vande Velde era uno de los hombres más importantes, un fijo a tener a su lado.