Racismo en el tenis
Brydan Klein es un joven australiano de 19 años que actualmente ocupa el puesto número 189 del ranking ATP. El gobierno de su país acaba de retirarle las subvenciones y ayudas de que disponía y el circuito de tenis profesional le ha sancionado con 6 meses de inhabilitación y 7.000€. ¿La razón? Racismo, simple y llanamente.
Hace unas semanas, quién fuera campeón junior del Abierto de Australia, se encontraba disputando las rondas previas del torneo de Eastbourne en Inglaterra contra el sudafricano Raven Klaasan, número 315 del ranking ATP. Al parecer, en ciertos momentos del partido el oceánico utilizó un lenguaje completamente inapropiado para dirigirse a su rival. El alto contenido racista de sus palabras incluso escandalizó al público asistente.
En un principio, fue solo la federación Australiana de tenis quien tomó cartas en el asunto, retirándole al jugador las ayudas económicas. Sin embargo, unas semanas después del suceso, la ATP decidió pronunciarse al respecto ampliando la sanción al considerar lo ocurrido como “flagrante” y “particularmente grave”. La penalización se hará efectiva a partir del 20 de julio, a no ser que el jugador interponga una apelación, algo poco probable, ya que fueron muchos los testigos de su desliz racista.
Klein no tenía antecedentes de polémica en las pistas, y la ATP apenas recoge algunos sucesos aislados de racismo entre jugadores. Sin embargo, parece que cualquier momento es bueno para que afloren sentimientos tan contradictorios. Un deporte como el tenis, lleno de viajes y enfrentamientos contra jugadores de múltiples nacionalidades debería tener esto más que superado.
Vía | Marca