El Rangers de Glasgow, en bancarrota

Para un aficionado a un equipo grande, acostumbrado a ganar, hay algo que peor que pasar una temporada sin ganar títulos, algo peor incluso que descender de categoría por primera vez en la historia, como le pasó el año pasado a River Plate … Lo peor que le puede pasar a cualquier aficionado a un equipo de fútbol es ver como éste desaparece.

Y eso es lo que le va a pasar al Glasgow Rangers, el club más laureado del fútbol escocés y uno de los que más títulos tienen en sus vitrinas a nivel mundial, aunque sólo 1 de de ese más de centenar de títulos que ha conseguido a lo largo de su centenaria historia sea europeo, la Recopa de Europa de 1972.

Toda la gloria del Rangers de poco le va a salvar de la liquidación. El club escocés debe aproximadamente 25 millones de euros a la Hacienda británica, según los datos que ha dado la prensa, y la Hacienda reclama el pago de esa cantidad a la de ya. De nada han servido los intentos a la desesperada para salvar el club, pues no se han aceptado los planes de viabilidad que presentó la directiva del club.

Así pues, el futuro de este histórico club europeo pasa irremisiblemente por la liquidación y la re-fundación. Ya se habla de que el nuevo nombre del equipo será el de The Rangers, con el artículo delante. Ahora habrá que ver si los clubes aceptan el recurso que han presentado para poder continuar en la Premier League escocesa, o bien si tendrán que comenzar completamente de cero, en la tercera división del país.

El club finalmente ha caído en manos de nuevos dueños, en este caso de un grupo de empresarios que comanda Charles Green. El Rangers se ha comprado por unos 7 millones de euros, pero todo tipo de relación contractual, teniendo en cuenta que se trata de una nueva sociedad, ha quedado acabada, por lo que se podría decir que ahora mismo, no tiene jugadores ni empleados, una situación que ahora hay que arreglar.

Contrasta esta situación del Rangers, que llega además después de recibir castigos deportivos como la exclusión de competiciones europeas y la pérdida de puntos, con la que se vive aquí en España. Los equipos de nuestra liga que tienen grandes deudas con Hacienda, tengan o no patrimonio que los avale, no suelen tener ningún problema y así anda el fútbol español, de concurso en concurso.

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