La sub 21 se queda sin Europeo ni Juegos Olímpicos tras perder con Serbia
Una, en apariencia, gran generación con grandes jugadores que juegan en grandes equipos, tales como Isco, Morata, Jesé, Deulofeu u Óliver Torres, se quedará sin acudir a los Juegos Olímpicos de Río de Janeiro 2016. La selección sub 21 no podrá estar en Brasil porque, antes, no estará en el Europeo de la República Checa de 2015, donde se reparten los billetes.
Para llegar a la República Checa, la selección había hecho una fase de clasificación brillante, con un empate como único debe y ya en un partido en el que no había nada en juego. Pero ante Serbia, en la eliminatoria que suponía el último escollo, la cosa ya ha sido otro cantar. Después de empatar en la ida, en la vuelta jugada en España ha perdido por 1-2.
La verdad es que no se puede decir que sea injusta la eliminatoria. A pesar de que España dominó el encuentro, tanto en Serbia como en Cádiz, ciertamente ha creado muy pocas ocasiones claras de gol en los 180 minutos de juego. En la ida tenían la excusa de que el césped no dejaba casi rasear la pelota, pero en la vuelta volvimos a ver a un equipo muy lento y, por tanto, muy previsible.
A Serbia le bastó estar muy bien plantada y salir una vez a la contra para poner la eliminatoria cuesta arriba. Una jugada de Kostic y Pesic, los dos jugadores de mayor calidad del equipo serbio, acabó en gol después de un desafortunado rebote entre Gayá y Saúl Ñíguez. Con muy poco, los serbios se ponían por delante, mientras que España no encontraba siquiera el camino a la portería.
La entrada de Sandro en la segunda mitad se dejó notar, y suya fue la mejor ocasión para la sub 21, con un remate que se fue al palo. El tiempo se cumplía y, lo que son las cosas, un mal centro de Sergi Roberto acabó involuntariamente en gol, sin que nadie lo tocase. Quedaba sólo el descuento por delante y la fortuna parecía sonreír a España.
A la desesperada, Munir se encontró con un balón muerto en el área pero falló. Mientras todo el mundo se preguntaba como había fallado esa clara oportunidad, Kostic conducía el esférico hasta el área rival y batía a Kepa. En un segundo, España había pasado de soñar con una épica remontada a despertarse de un bofetón de realidad. No habrá Europeo, y por tanto no habrá samba española en Río.