Después de un periodo muy tranquilo en el tema de fichajes en la Liga Endesa y tras el cierre del mercado de traspasos en la NBA nos llegan noticias con respecto a dos bases veteranos que toman caminos muy diferentes con la intención de mejorar su situación. Hablamos de Derek Fisher y de Carlos Cabezas, jugadores de entidad lejana entre si pero que hoy han salido a la palestra por la negociación de sus contratos.
Hace diez años, en Lisboa, unos chavales de apenas dieciocho años dirigidos por Charly Sáenz del Aja conseguían para el baloncesto español un hecho histórico al ganar la final de un Campeonato del Mundo Junior a la selección de Estados Unidos y hacerse con una medalla de oro que catalogaría a esa generación con el sobrenombre de los Juniors de Oro.
El Khimki ruso dirigido por Sergio Scariolo se ha hecho en los dos últimos días con dos bases de primer nivel como son los internacionales españoles Raúl López y Carlos Cabezas. Ambos jugadores se unirán al proyecto ruso por dos años tras abandonar el Real Madrid y el Unicaja Málaga, respectivamente.
A pesar de que Unicaja cayó eliminado en playoffs, la temporada no ha hecho más que empezar en las oficinas del club malagueño. Y es que para la próxima temporada, sólo tres jugadores tienen contrato: Berni Rodríguez, Omar Cook y Robert Archibald. Así que la directiva y Aíto tiene mucho trabajo por delante para preparar una plantilla competitiva para la próxima temporada.
Uno de los nombres que más va a sonar en el mercado baloncestístico es el de Carlos Cabezas. El contrato que une al base malagueño con el Unicaja termina este verano, y el jugador no vería con malos ojos un cambio de aires. Incluso no descarta que acabe dando el salto, y cruze el charco en dirección a la NBA.