La NBA cerrará esta noche las semifinales de conferencia con dos partidos en el que tanto Los Ángeles Lakers como los Boston Celtics se juegan el todo por el todo, ya que se encuentran al borde del precipicio. Los dos finalistas de la pasada temporada han encontrado en Houston Rockets y Orlando Magic a dos rivales muy duros que les han forzado a disputar este séptimo partido en el que los vencedores pasarán a las finales mientras que los perdedores ser irán de vacaciones. Tanto los Cleveland Cavaliers de Lebron James como los Denver Nuggets de Billups y Anthony esperan ya a sus respectivos rivales.
Habrá séptimo partido en Los Angeles. Los Lakers volvieron a dar su peor cara en el sexto partido de la serie en Houston y se fueron calentitos a casa. Ahora se las tendrán que jugar al todo o nada en un vibrante último encuentro. Desde el inicio, los Rockets dejaron claro quien iban a ser los ganadores del partido, con un parcial inicial de 21 a 3.
Esta vez sí. Los Lakers aprovecharon la ausencia de Yao Ming y su superioridad en centímetros para hacerse con el quinto partido de la serie, gracias a unos brillantes minutos de juego entre el primer y segundo cuarto, que decantaron el partido del lado angelino y trastocó todos los planes de Rick Adelman. Fueron Kobe Bryant (26 puntos) y Pau Gasol (16 puntos y 13 rebotes) los mejores en el ataque Lakers.
A pesar de no contar con Yao Ming, los Rockets no pasaron apuros y apalizaron a los Lakers, para volver a Los Angeles con la serie empatada a dos. Un inicio espectacular y el acierto de Aaron Brooks (34 puntos) y Shane Battier (23 puntos) decidieron el encuentro ya en los primeros minutos juego. El mejor de los Lakers fue Pau Gasol (30 puntos), que maquilló su partido anotando 18 puntos en el último cuarto, en los minutos de basura. Para el quinto partido es duda Lamar Odom, tras una mala caída.
Tener un hombre que marca las diferencias es una garantía en el 90% de las ocasiones. Ayer precisamente fue una de esas ocasiones en las que Kobe Bryant (33 puntos y 6 rebotes) fue el faro que enseñó el camino de la victoria en un partido que no se rompió hasta el tercer cuarto cuando Lamar Odom (16 puntos y 13 rebotes), con dos triples, y Pau Gasol (13 puntos y 6 rebotes) con varias canastas seguidas, abrieron un hueco considerable.
L.A. Lakers tenía que ganar a toda costa este partido y así lo hizo, por lo civil y por lo criminal, enganchando fases de buen juego y defensa extrema para sacar adelante un partido que se complicaron ellos solitos, pues se dejaron remontar 14 puntitos antes del descanso con un enchufadísimo Ron Artest (25 puntos) que lideró el ataque de los Rockets ante la ausencia, no física pero sí mental, de Yao Ming (12 puntos y 10 rebotes), y con suplente, Carl Landry (21 puntos), no habitual en estos números.
Noche de sorpresas en la NBA con dos victorias a domicilio. Los Rockets se llevaron el gato al agua en el Staples Center de Los Angeles, gracias a su buena defensa y encontrarse mejor entonados en ataque, donde sobresalió Yao Ming (28 puntos y 10 rebotes). Ni Bynum, en una noche para olvidar, ni Gasol pudieron frenar a Yao, que además en defensa fue una auténtica muralla china.