El seleccionador español Vicente Del Bosque ha hecho pública este mediodía la convocatoria de la selección española para dos partidos que tendrá que afrontar en este mes de septiembre que está al llegar, uno amistoso contra Argentina, y uno oficial ante Liechtenstein, el que será el primer partido de la clasificación para la Eurocopa de 2012.
18 son los hombres convocados por Luis Milla para afrontar desde mañana un nuevo Campeonato de Europa sub 19. Al igual que en el la selección absoluta, los hombres del Barcelona son mayoría en este grupo sumando un total de 7 convocados en una lista en la que los descartados fueron los defensas Kiko Femenía (Hércules) y Luna (Sevilla) y los centrocampistas Diego Royo (Athletic) y Álex Fernández (Real Madrid), uno de los mejores talentos que tiene en su cantera el equipo madrileño.
Si en algún lugar ha crecido la afición por el fútbol en los últimos tiempos ha sido Estados Unidos. El soccer sigue siendo un deporte minoritario con respecto al baloncesto, el fútbol americano o el beisbol, pero el desarrollo de la Major League Soccer es evidente, y el desarrollo de la selección más aún. Mucho tiene que ver en esto último el que muchos jugadores estadounidenses hayan dado el salto a otras ligas y conozcan la competición de verdad.
Si la lógica se impone, el rival de España en los octavos de final sería Portugal. El equipo luso afronta su quinto Mundial con la ayuda casi divina que aporta la presencia de Cristiano Ronaldo en sus filas. El '9' del Real Madrid y el '7' de Portugal ya ha demostrado sobradas veces su capacidad para resolver el solo las situaciones más complicadas con goles o asistencias y para ocupar cualquier posición ofensiva según la necesidad. Y esa Portugal, precisamente, lo necesita más que nunca.
De las 32 selecciones sólo hay una que no tiene antecedentes en un Mundial de fútbol: Eslovaquia. Eso sí, seguro que muchos eslovacos han defendido en algún Mundial la camiseta de Checolosvaquia cuando convivían junto a los checos bajo una misma bandera. Pero, desde que en 1993 andan cada uno por su lado, la selección eslovaca no había conseguido colarse en ningún torneo de importancia hasta ahora, hasta Sudáfrica 2010.
En el Mundial de Sudáfrica 2010 nos vamos a encontrar una Alemania diferente. No porque dejen de ser favoritos, no porque vayan a cambiar su estilo ni porque dejen de ser un bloque solido, no porque dejen de ser competitivos. Simplemente, el criticado seleccionador Joachim Low está rejuveneciendo al combinado germano, y las generaciones que vienen por detrás le están poniendo fácil esta tarea.
Llevan 16 años sin pisar un Mundial y en su única participación se fueron de vacío, pero no podemos negar que el fútbol en Grecia ha crecido, poco, pero ha crecido. Prueba de ello fue la sorprendente victoria en la Eurocopa de 2004 en Portugal, aunque los helenos se dedicaban más bien a combatir y destruir la esencia del juego mismo, y prueba de ello es que regresan a un Mundial tras no perderse tampoco la Euro de 2008. Por supuesto, lo hacen con Otto Rehhagel en el banquillo.
La selección de Eslovenia es un equipo con una historia relativamente joven desde que echara a andar allá en el año 1991 cuando este pequeño país se separó de la antigua República de Yugoslavia. En esa corta vida, el punto álgido del fútbol esloveno llegó entre 1999 y 2002, cuando la selección llegó a disputar una Eurocopa y un Mundial gracias a una generación de jugadores liderados por Zlatko Zahovic, máximo goleador de la selección y el hombre que más veces ha vestido su camiseta.
Poco podemos de la selección de Nueva Zelanda salvo que será la comparsa del Grupo F y probablemente del Mundial. En la lejana isla oceánica gusta más el rugby o el cricket, por eso, el fútbol es un deporte minoritario y ni hay una liga competitiva ni se exportan jugadores a ligas importantes. La mayoría de los kiwis se reparten entre la liga australiana y la norteamericana, salvo cinco jugadores que juegan en Inglaterra. Uno de ellos, el nacionalizado Rory Fallon fue precisamente quien llevó a Nueva Zelanda al Mundial.
El tercer rival de España en la primera fase es Chile, un equipo que vuelve a un Mundial 12 años después y que, sorprendentemente, lo hace como una de las tapadas pese a que en la fase de clasificación de la CONMEBOL finalizó en segundo lugar. La Roja es un equipo joven y con carácter claramente ofensivo en el que se nota la mano de Marcelo Bielsa, un adicto al trabajo que utiliza un curioso 3-3-1-3 como sistema de juego. La única incógnita de Chile es saber si rendirán en Sudáfrica o si les quedará grande.
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