No estaba Neymar, lesionado y duda hasta para la final, y tampoco estaba Leo Messi, baja de ultimísima hora por un cólico nefrítico, pero estaba Luis Suárez. Con el uruguayo bastó para que el Fútbol Club Barcelona superara con claridad a su rival en las semifinales del Mundial de Clubes 2015, el Guangzhou Evergrande de China, dirigido por Scolari.
El Mundial de Clubes 2015 ya ha comenzado. Aunque lo bueno no llegará hasta el 16 de diciembre, cuando entren en acción el Barcelona y River Plate, ya se han jugado hasta tres partidos en la competición, todos ellos para determinar quienes serán los rivales en semifinales del equipo español y el equipo argentino.
Como os contábamos hace poco, Marcello Lippi se retira pero seguirá ligado a su último club, el Guangzhou Evergrande, ya que al técnico italiano le resta todavía un año de contrato, al menos. Así, Lippi ejercerá de director técnico en la faceta deportiva y su primera misión ha sido la de buscar un hombre que ocupe el lugar que ocupaba él en el banquillo chino.
Quedaron listas las cuartofinalistas del sector superior en el Toray PPO Tennis de Tokyo este miércoles. La checa Lucie Safarova y la eslovaca Dominika Cibulkova clasificaron en el primer turno mientras que la serbia Ana Ivanovic (3) eliminó a Victoria Azarenka y avanzó junto a la germana Angelique Kerber (1).
La canaria Carla Suárez Navarro (8) debutó con triunfo en el Toray PPO Tennis venciendo a la japonesa Kurumi Nara en tres sets como también lo hizo la bielorrusa Victoria Azarenka . Otras ganadoras de este martes son la eslovaca Daniela Hantuchova y la americana Coco Vandenweghe. Sorprendieron las derrotas de Sara Errani (5), Daniela Hantuchova y Sabine Lisicki.
Sin sorpresas en la primera de las semifinales del Mundial de Clubes 2013, pues pasó lo que tenía que pasar: un cómo y abultado triunfo del Bayern Munich sobre el Guangzhou Evergrande. La diferencia entre el mejor equipo de Asia y el mejor equipo de Europa han quedado bastante patentes, pues el conjunto que dirige Pep Gurdiola no ha necesitado forzar la máquina para llevarse el triunfo.