1ª División: El Tenerife logra una sufrida victoria frente a un Athletic encerrado.

El Tenerife consiguió chafar al Athletic la posibilidad de lograr el mejor comienzo de su historia con 4 victorias, pese a que puso empeño en fallar todo lo que pudo. Al final, Mikel Alonso se equivocó y marcó gol para lograr el uno a cero definitivo. El conjunto bilbaíno salió con varias rotaciones y una delantera suplente, con Llorente y Toquero en el banquillo, y no estuvieron cómodos en el campo nunca.

El Tenerife comenzó un poco frío, sin dominar la pelota pero con alguna acción suelta. Sin embargo la cosa se complicó mucho de entrada tras la lesión de Ricardo León, sin duda el mejor del conjunto local hasta la fecha, con una fractura del tabique nasal que le mantendrá alejado del campo un buen tiempo. Entro Mikel Alonso en el 36 y a posteriori se demostró que el vasco tenía ganas de morder a los leones.

Ni Nino ni Alfaro estuvieron acertados y desperdiciaron hasta 17 tiros a puerta, presas del pánico y de los nervios conforme pasaban los minutos y el dominio del Tenerife se materializaba en balón, jugadas, quiebros y desbordes, pero sin ver el gol. Hasta que cerca del final Mikel remató de cabeza un centro de Alfaro que se paseó por el área sin oposición. La grada estalló y la afición, que había empujado a su equipo durante todo el choque, vio recompensada su sufrimiento con un gol y una victoria Tenerife Style, sufriendo hasta el final. No llegará el día en que el Tenerife le meta 4 goles a un rival en 60 minutos.

Asentándose en la categoría y no cediendo ni un punto en su feudo, el sábado toca ir a por todas contra Kaká y su Real Madrid. Que tiemblen los merengues.

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