Washington Wizards, un equipo de armas tomar
Los Washington Wizards son uno de los equipos más peligrosos de la NBA y no precisamente por sus números o por lo que sus jugadores demuestran dentro de la cancha, sino que donde realmente guardan sus armas, en el sentido más literal de la palabra, es de vestuarios para adentro. Los acontecimientos se están «disparando» y en todos los escándalos se está viendo involucrados la carismática estrella de los Wizards, Gilbert Arenas.
Hace algunas semanas, se descubrió que Arenas guardaba en los vestuarios del Verizon Center de la capital estadounidense un arma en su taquilla. El base floridense se escudó en que quería alejar las armas de casa tras el nacimiento de su tercera hija en el mes de diciembre, pero al final, le ha venido bien para otros propósitos. Hace pocos días, Arenas y su compañero de equipo Javaris Crittenton acabaron encañonándose a punta de pistola tras la disputa de un partido.
El motivo que causó la discusión podría ser una posible deuda que Arenas tendría sobre Crittenton y que podría ascender a varios miles de dólares, cosa que no es de extrañar a sabiendas de que Arenas es un gran aficionado al juego, a los videojuegos, y por consiguiente, al póker online. Porque el Agente Zero, además un jugador de baloncesto, es un ser más que complejo.
Una niñez difícil lo convirtió en un adolescente problemático que encontró refugio en el baloncesto, pero la personalidad de Arenas tras su salto al profesionalismo ha ido evolucionando hasta convertirse en una persona muy maniática, caprichosa y prácticamente intratable. Son muchas sus manías tanto dentro de las pistas, a la hora de lanzar y defender, como fuera en su vida diaria. Además, está enganchado a internet, al juego, a las consolas y ya ha sido detenido en varias ocasiones por conducir sin permiso, en estado de embriaguez o por posesión ilícita de armas.
Con la policía investigando todo el asunto, la NBA a mi modo de ver debería meter mano y sancionar de manera ejemplar a estos jugadores puesto que no son para nada un ejemplo a seguir para los niños, muchos de los cuales serán fans del hombre franquicia de los Wizards. Eso sí, la NBA no puede prohibir que los jugadores posean armas, pero sí que no permite que porten con ellas en cualquier evento relacionado con su marca, y mucho menos que las escondan en los vestuarios.
Vía | El País